Libertad
Libertad: Facultad humana de obrar y expresarse según la propia voluntad y bajo la responsabilidad de uno mismo.
Esta bella acepción del gran diccionario LAROUSSE de la lengua sobre la palabra o concepto al que dedico estos minutos, pasa de ser algo básico y valor universal necesario en el mundo de la razón, a pura utopía o desde el punto de vista mas optimista, el resto o sobrante que de la misma queda tras pasar por los condicionamientos que nos rodean en la realidad tangible.
Estos condicionamientos que suelen pasar inadvertidos en el vertiginoso mundo que pateamos y sufrimos cada día , giran alrededor de nosotros como una piedra de esmeril acotando la libertad, llegando en algunos casos a ser una simple mancha de tinta en un papel, sin continente ni contenido.
De entre los casos que me rodean, de los cuales me hago eco a continuación, se pueden sacar conclusiones y llegar a juicios “a posteriori”.
En primer lugar paso a exponer mis limitaciones de libertad cada día en una barra, donde tengo que medir mis criterios políticos, deportivos, económicos, culturales, religiosos etc. debido a la “condición de necesidad”, o sea llenar la caja todos los días para cubrir los gastos y necesidades del negocio.
Amigos dedicados a la educación ,ven limitada su libertad de cátedra debido la gran presión ejercida desde las APAS cuando tratan de explicar puntos de vista religiosos filosóficos u otros varios que no se someten a los “ cánones morales” establecidos en nuestros adoctrinamientos culturales. También su libertad de expresión se limita en las charlas que mantienen con los padres en las tutorías, tratando de decir lo tarugos que son sus hijos lavando las palabras con “vernel” para no dañar el ego paterno, que ya tiene preparado todo el trayecto académico de su nene.
Mi cliente, el concejal, ve limitada su libertad de expresión pública debido al encorsetamiento del llamado “argumentario de partido” cuyos límites, altos y escarpados, controlan cualquier descarrilamiento que se pudiera producir por la alta temperatura de la caldera del mismo.
La secretaria de arriba tiene como condición “sinnecuanum” para desarrollar su trabajo, una ropa ajustadita, y más bien corta y desbordante por arriba, para una mejor atención al público.
Este pequeño muestreo unido, a los condicionamientos individuales comunes a todos (pareja,hijos,comunidad de vecinos,hacienda,hipoteca, cuñados/as, etc.) me hace plantearme seriamente si no deberíamos apartar de nuestro vocabulario habitual ciertas palabras que ,después de tan dura erosión, se quedan con menos contenido que un hueso de aceituna
1 comentario
KinJongII -
Un saludo, amigo.